Para la Aviación Civil Cubana, los primeros días del mes de octubre son días tristes, días de luto, días desgarradores.
Llegan a la memoria de aquellos que los conocieron esos recuerdos de los amigos, de los compañeros de trabajo, los recuerdos de una tripulación que trasladaba desde Barbados a las jóvenes promesas del deporte cubano, una tripulación con un brillo en los ojos, típico del que siente orgullo y amor por su país.
Aquellos que conocieron a los tripulantes recuerdan cada octubre sus sonrisas, sus abrazos, sus ganas de vivir, su orgullo por pertenecer al sector de la aviación. Son recuerdos puros, sinceros, que de pronto se ensombrecen y se vuelven dolorosos al rememorar como fueron asesinados de forma brutal.
Y es tan fuerte esa identificación con los Mártires de Barbados, nuestros Mártires, que se llega a sentir casi en carne propia la desesperación de nuestros hermanos en ese, su último vuelo. Incluso para las jóvenes generaciones, al escuchar esa voz desgarrante «eso es peor, pégate al agua», es imposible contener las lágrimas.
La Aviación Cubana no olvidará jamás aquel 6 de octubre de 1976, cuando la historia de Cuba vistió luto. La destrucción en pleno vuelo del avión de Cubana que cobró la vida de las 73 personas a bordo, convirtiendo ese hecho en uno de los actos más sangrientos y dolorosos que ha vivido nuestro país.
Solo fue posible mantener en pie a las familias de las víctimas por el valor de un líder, por el calor del pueblo herido, compacto y firme tras la noticia.
Desde ese día y cada año, Cuba recuerda a sus Mártires de Barbados. A pesar de que las circunstancias actuales por la COVID 19 no permiten efectuar actos de mayor participación de público, como se han realizado en años anteriores, la Aviación no renunció a rendir tributo a sus símbolos.
Hoy 5 de octubre se colocó una ofrenda floral en el sitial histórico, en la sede de la Aviación Cubana y mañana 6 “Día de las Víctimas del Terrorismo de Estado” será colocada otra, en el cementerio de Colón, La Habana.
La ceremonia de hoy, sencilla pero emotiva, contó con la presencia de Eduardo Rodríguez Dávila, Ministro de Transporte de Cuba; Fermín Umpierre Iraola, Secretario General de Transporte y Puertos de La Habana. Estuvieron presentes además Armando Daniel López, Presidente del Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba (IACC); Roberto Peña Samper, Presidente de la Corporación de la Aviación Cubana S.A (CACSA), María Rojo, hija de una de las víctimas del atentado terrorista, así como algunos Vicepresidentes, Directivos y Trabajadores de IACC, CACSA y la empresa de Servicios a la Aviación Civil (SERVAC), también miembros de organizaciones políticas y de masas y amigos de las víctimas en representación de todo el sector.
Los Mártires de Barbados, siempre estarán en la memoria de la Aviación Cubana. Al denunciar este hecho no se busca venganza, Cuba busca justicia.
Continuamos la denuncia para que se conozca este hecho arbitrario, de extrema crueldad y que no se repita jamás crimen semejante. Los que lo perpetraron murieron en impunidad, bajo el amparo del Gobierno Norteamericano. Ese Gobierno que continúa arremetiendo contra los derechos de soberanía de Cuba y de otros países. Que crea guerras donde perecen miles de inocentes. Que mantiene un férreo y cruel bloqueo económico, comercial y financiero contra nuestro país. Y que aún en las circunstancias actuales en que arrecia una crisis global sin precedentes por la pandemia Covid-19 recrudece las presiones contra Cuba y Venezuela.
Recordamos hoy, recordaremos mañana y recordaremos siempre con profundo dolor, pero con la convicción de su certeza, las palabras de despedida de duelo de las víctimas:
“No podemos decir que el dolor se comparte. El dolor se multiplica. Millones de cubanos lloramos hoy junto a los seres queridos de las víctimas del abominable crimen. ¡Y cuando un pueblo enérgico y viril llora, la injusticia tiembla!”
Fidel Castro Ruz
Con Información: www.cacsa.com.cu